Crecimiento Acelerado, Necesidades Más Profundas en una Ciudad que Sigue Cambiando

¿Cuál es el Rol de la Iglesia en el Condado Lake de Hoy?

Algunas ciudades del Condado Lake están creciendo rápidamente. Cada mes se construyen nuevas viviendas, se abren escuelas, y llegan más familias. Pero con ese crecimiento viene una necesidad más profunda. Muchos no se detienen a pensar en los cambios que están ocurriendo a su alrededor. Su enfoque está en sus vidas, sus rutinas, sus horarios, y sus familias.

Pero para otros, estos cambios despiertan preguntas más profundas: ¿Qué tipo de vecinos llegarán? ¿Cómo afectará este crecimiento a la cultura de nuestra ciudad? ¿Seguirán Clermont, Minneola, Groveland y sus alrededores siendo lugares familiares, o se volverán extraños a medida que convergen distintas culturas?

Como pastor y como alguien que ama genuinamente estas comunidades, a menudo reflexiono sobre una pregunta simple pero urgente, ¿Cuál es la necesidad más profunda de nuestras comunidades en medio de tanto crecimiento?

Muchos responderían: más programas comunitarios, más ligas deportivas, o más actividades después de la escuela. Todo eso es importante y necesario. Pero ¿realmente estamos respondiendo a la necesidad más profunda de nuestros vecinos? ¿Estamos cultivando esa plenitud, ese sentido de pertenencia y transformación que tantos anhelan?

La pregunta más profunda es, ¿qué es lo que realmente satisface?

Nuestra ciudad puede estar creciendo en número, pero no se trata solo de población. Se trata de personas, almas que cargan con dolores invisibles. Muchos se sienten solos incluso rodeados de multitudes. Muchos corren tras el éxito, la seguridad o simplemente la supervivencia, pero aun así se acuestan preguntándose si realmente importan o si pertenecen.

La iglesia debe preguntarse con honestidad, ¿estamos ofreciendo lo que realmente están buscando?

Como nos recuerda un artículo de 9Marks, “El discipulado no es solo un programa o una clase. Es la inversión intencional y relacional de un creyente en la vida de otro, ayudándolo a seguir a Jesús con mayor fidelidad y profundidad.” No se trata de programas de mentoría ni de relaciones superficiales. Se trata de una transformación profunda. Se trata de presentarles al único que puede llenar ese vacío que todos llevamos dentro. Jesucristo es la respuesta al anhelo detrás de cada otro anhelo.

Del suburbio al campo misionero

El crecimiento es inevitable. Personas están llegando, y otras, sintiéndose desplazadas se están yendo en busca de una vida “más tranquila”. Pero si estás tentado a desconectarte o retirarte, quiero retarte a hacer lo contrario, acércate más. Hazte estas preguntas: ¿Cuánto tiempo crees que vivirás? ¿Qué años tienes realmente garantizados?

Las Escrituras nos recuerda "Pero nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo." (Filipenses 3:20) "Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría." (Salmo 90:12) Como creyentes, no estamos aquí por casualidad. Somos ciudadanos del cielo colocados aquí con propósito: para brillar como luz en medio de una ciudad que está cambiando.

Nuestro rol, ser luz en medio del crecimiento

Creo que la mayor necesidad en el Condado Lake en este momento es la presencia de comunidades centradas en el evangelio, iglesias que: Oren con perseverancia. Se conecten con intención. Proclamen con claridad la esperanza en Cristo.

Sí, Dios está trayendo las naciones a nuestra puerta. Ya no hace falta comprar un boleto de avión para alcanzar a los no alcanzados. Están aquí, son tus vecinos, tus compañeros de trabajo, los amigos de tus hijos. Tenemos una gran oportunidad de vivir como sal y luz entre las mismas personas que Dios ha puesto a nuestro alrededor. Ofrezcámosles el regalo más grande. No más programas, sino el evangelio. No mejores actividades, sino esperanza verdadera. No buenas intenciones, sino un Salvador que los ama y los llama a ser parte de Su familia. 

Este es el rol de la iglesia en una ciudad que está creciendo
Ser un faro de verdad, esperanza y amor, presente fielmente en una comunidad que necesita mucho más que comodidad o conveniencia. Necesita a Cristo.